Corta la cebolla en dados pequeños. Pon un chorro de aceite en una sartén honda o una cazuela tradicional (donde vayas a hacer el arroz), añade dos o tres pizcas de sal para que sude y cocínala a fuego medio durante unos 8 o 10 minutos. Añade el ajo picado fino y déjalo a fuego medio un par de minutos.
Corta las espinacas en trozos pequeños y ponlas en la cazuela junto con la ralladura de las dos limas y la cucharadita rasa de comino. Baja el fuego un punto y tapa, deja que se cocine durante 5 minutos. Pasado ese tiempo las espinacas deberían haber mermado mucho, dales varias vueltas.
Añade el arroz basmati y pimienta molida al gusto, remueve durante uno o dos minutos para que el arroz se empape de los sabores.
Echa el agua y un poco de sal. Baja el fuego un punto, tapa la cazuela y deja cocer unos 14 o 15 minutos (el tiempo que recomiende el fabricante).
Sirve con las aceitunas negras y con una lima cortada en cuartos. Exprime la otra lima justo antes de comer.
Consejos para la receta
El corte de la espinaca: Si no quieres encontrarte largas tiras de espinaca, para mi gusto no demasiado agradables, debes cortar las espinacas en trozos más o menos pequeños -de unos 2 o 3 centímetros como máximo-.
Acompañamiento: Generalmente encontrarás este arroz típico de Grecia acompañado con dados de queso feta (añádelos una vez haya cocido). En esta ocasión hemos preferido poner aceitunas negras y el indispensable chorro de lima.