Añade todos los ingredientes en el mortero y machaca hasta que quede más o menos fino. En esto no hay reglas, el condimento cajún que puedes comprar en tiendas especializadas suele ser muy fino, el cajún casero que nosotros hemos hecho es más rústico, cuestión de gustos.
Guarda la mezcla en un bote hermético perfectamente limpio, mejor si es de cristal, también puedes guardarlo en latas (mejor olvídate del plástico). Consérvalo en un lugar oscuro, seco y fresco.
Consejos para la receta
Utiliza granos enteros. Como puedes ver, casi todas las especias que utilizamos en nuestro cajún casero pueden comprarse enteras (en grano) o molidas. Lo mejor para sacar todo el aroma y aumentar el tiempo de conservación es comprarlas enteras y molerlas en el momento.
Evita los procesadores con cuchillas. Para preparar esta mezcla te recomiendo utilizar el mortero de toda la vida o un molinillo con muelas de cerámica (como los que se utilizan para moler el café). Evita en la medida de lo posible los molinillos de cuchillas, recalientan en exceso, aumentan la oxidación, reducen las propiedades y empeoran la conservación de la mezcla.