Pica el ajo y la cebolla en trozos más o menos finos. Reserva.
Pon una sartén a fuego fuerte. Echa unas gotas de aceite y coloca los champiñones con "el hueco" mirando hacia arriba. Cocina hasta que estén dorados (uno o dos minutos serán suficientes). Dales la vuelta y haz lo mismo, espera a que estén dorados. Reserva.
Sofríe la cebolla y el ajo en la misma sartén junto con un buen chorro de aceite y unas pizcas de sal para que se cocinen un poco antes. Mantén a fuego medio durante 10 minutos.
Echa el bacon. Cocínalo tres minutos a fuego medio-alto. Remueve de vez en cuando.
Por último, escurre el aceite de las latas de atún. Echa el atún troceado en la sartén y cocina un minuto más removiendo hasta que se integre.
Rellena los champiñones con la mezcla que has preparado en la sartén.
Cubre los champiñones con el queso rallado.
Hornea los champiñones con atún durante 15 minutos a 180ºC. Pasado ese tiempo, cambia a modo grill para que se doren (2 o 3 minutos).
Consejos para la receta
¿Cuáles son los mejores champiñones para rellenar? Aquí lo mejor es elegir unos champiñones grandes. En mi caso no tenía y eso hace que admitan menos relleno. A partir de ahí, puedes elegir el clásico champiñón de toda la vida o el portobello (cuestión de gustos).
¿Se puede sustituir el bacon? Puede chocar ese ingrediente, pero tiene explicación. El bacon aporta jugosidad y un extra de sabor. A mí me encanta junto con el atún. Si prefieres hacerlo más ligero, puedes cambiarlo por jamón york o serrano, o directamente no echarlo.