La gente se complica demasiado a la hora de cocer el arroz blanco.
Unos lo remojan durante horas, o lo lavan una y otra vez para deshacerse del almidón. Otros lo cuecen en litros de agua para después escurrirlo. Los más atrevidos lo lavan después de cocerlo.
¿Se debe lavar el arroz en algún momento?
Lavar el arroz antes de cocerlo, ¿sí o no?
No.
La principal razón por la que puedes querer remojar el arroz antes de cocerlo es el arsénico, ¿verdad?
Remojándolo vas a eliminar una cantidad ínfima de ese material pesado, pero es que además vas a quitar otro nutrientes (y mucho sabor).
¿Qué es lo mejor para «comer menos arsénico»?
Comprar un arroz español de calidad. El arroz made in Spain tiene mucho menos arsénico que el de la mayoría de países porque aquí regamos con agua limpia, sin contaminación.
El arroz español se sitúa en una media de 180 microgramos de arsénico por kilogramo, incluso hay variedades españolas de arroz con mucho menos arsénico (por debajo de 50). Para que te hagas una idea, la media internacional supera ampliamente los 250 microgramos.
Por tanto, para evitar el arsénico es mucho mejor comprar un buen arroz de España. No solo contribuirás a mejorar tu salud, también colaborarás en mejorar nuestra economía.
¿Hay que enjuagar el arroz después de cocerlo?
No, por Dios. Lavar el arroz después de cocerlo debería estar prohibido.
Cuando aclaras el arroz, básicamente le quitas nutrientes y sabor. Será peor que la típica sopa de hospital. Tendrá cero aroma.
¿Lo haces por adelgazar?
Mal asunto. El 80% del arroz es almidón, puedes lavarlo 15 veces que ahí seguirá.
Para adelgazar, lo mejor es hacer un buen arroz y comer un poco menos. Como decían nuestros abuelos… Menos plato y más zapato.
¿Quieres dejarlo más suelto?
Lavar el arroz para retirar el almidón y dejarlo más suelto es como ponerte el chubasquero en plena tormenta perfecta.
La sustancia responsable del apelotonamiento se llama amilosa y no se elimina con un simple lavado, aquí tienes toda la información técnica.
Puedes remojar el arroz una y otra vez. Puedes dejarlo en remojo toda la noche. Con esos «trucos» no conseguirás gran cosa. Las claves para dejarlo suelto:
- Elije una variedad de grano largo (basmati o jazmín funcionan bien).
- Rehoga el grano con un poco de aceite antes de cocerlo.
- Cocínalo a fuego moderado o bajo (hervor lento).
Y como extra, también puedes rehogar cebolla antes de cocer el arroz, eso le dará un punto extra de jugosidad.