A veces preparamos recetas de salsas y por un motivo u otro terminan líquidas, casi inservibles. Esto puede pasar porque la receta no es la que debería ser, por despiste o por un error durante la preparación. El recurso más habitual es espesarla con harina, pero no siempre se puede (por el glúten) o se quiere hacer así.
¿Cómo espesar la salsa sin harina ni maicena? Es posible. Te contaré las mejores alternativas para espesas tus salsas sin añadir harinas ni derivados. Elige el método que mejor se adapte a lo que tengas en la cocina y a tus propios gustos.
Reduce la salsa hasta que espese
Lo primero que yo probaría sería la técnica de la reducción. Solo es aplicable para salsas calientes.
Consiste en cocinar la salsa a fuego medio-bajo, dejándola reducir hasta que se espese y concentre su sabor. Tiene la ventaja de que no hay que añadir ingredientes adicionales y el problema de que va a quedar más intensa (quizá no quieras eso).
En cualquier caso, para las salsas calientes, es un recurso que debes conocer. Reducirla suele ser la primera alternativa si quieres espesarla sin recurrir a harinas y derivados.
Añade lácteos (solo para salsas frías)
Si quieres espesar una salsa tártara o una salsa deluxe puedes usar un derivado lácteo «con cuerpo»:
- Crema de leche.
- Yogur griego.
- Queso crema
Cualquiera de esos ingredientes es ideal para espesar sin harina. Aportará mucha consistencia. Es importante añadirlos en frío y en salsas compatibles (que tengan algún lácteo entre sus ingredientes).
Usa gelatina, Agar-agar o Goma Xantana
No es mi método favorito, pero también puedes usar una pequeña cantidad de gelatina, Goma Xantana o Agar-agar para espesar salsas sin harina ni maicena.
Para ello, mezcla una pequeña cantidad de gelatina en polvo o Agar-agar con agua fría y añádela a la salsa caliente, removiendo constantemente hasta que se disuelva por completo.
También puedes utilizar Goma Zantana, un polisacárido natural que se utiliza como espesante en la industria alimentaria. Es ideal para espesar salsas sin gluten y con pocas calorías. Agrega una pequeña cantidad (1/8 a 1/4 de cucharadita) mientras remueves la salsa y observa cómo se espesa de forma «mágica».
Prueba a espesarla con purés
Una de las formas más saludables y naturales de espesar salsas es a través del uso de purés de vegetales o legumbres. No siempre es posible hacerlo así porque alterarás el sabor de la salsa, pero es una alternativa que debes conocer. Esta solución está libre de gluten.
¿Qué puedes triturar para espesar una salsa?
Tienes un montón de opciones:
- Patatas.
- Zanahorias.
- Calabaza.
- Aguacate.
- Tofu.
- Legumbres (garbanzos, lentejas, frijoles…).
Para salsas calientes te recomiendo añadir las legumbres o verduras bien cocidas y trituradas; para espesar salsas frías puedes recurrir al tofu o al aguacate.
Como ves, hay muchas formas de espesar salsas sin harina. Todo depende del tipo de salsa que quieras espesar y del resultado que quieras conseguir. Lo ideal es añadir el espesante (sea cual sea) muy poco a poco para que no pases de una salsa líquida a un auténtico «mazacote».
