Se prepara de mil y una formas, con carne picada de cordero (la versión original), de ternera o de cerdo. Encontrarás recetas con quesos todo tipo, con yogur griego e incluso versiones veganas de lo más apetitosas. La musaka tiene tantas versiones que hablar de «la auténtica y original» receta griega es misión casi imposible.
Una de nuestras referentes en cocina es Lorraine Pascale, en su libro La Cocina Fácil prepara una musaka sin bechamel muy sabrosa y original.
Aquí tienes su receta paso a paso, hemos hecho algunas variaciones en los ingredientes y el proceso para adaptarla a nuestro gusto.
Musaka sin bechamel
No es una receta complicada, te llevará menos tiempo que una lasaña tradicional.
Empieza por el relleno de carne, verduras y especias. Mientras se hace puedes dejar lista la capa superior con quesos y preparar la berenjena y las patatas. Si te organizas bien de principio a fin la tendrás lista en algo menos de una hora.
El montaje es sencillo y no tiene ningún secreto, una capa de berenjena, otra de la jugosa carne y otra de la «patata semicocida», repite el proceso y cubre con la crema de queso que has preparado anteriormente. ¡Al horno y a gozar!
Receta de musaka sin bechamel
Ingredientes
- 500 g carne picada de ternera (o de cordero)
- 3 patatas medianas
- 400 g tomate triturado
- 1 berenjena grande
- 1 manojo de ajetes
- 1 cebolla morada pequeña
- 1 vaso pequeño de vino tinto
- 2 cucharadas de harina
- 1 cucharadita de orégano
- 1 cucharadita de canela
- 1/2 cucharadita de comino molido
- 1/2 cucharadita de tomillo
- aceite de oliva
- sal
Para la salsa:
- 200 g queso cottage
- 125 g queso curado o viejo
- 2 yemas de huevo
- nuez moscada
Paso a paso
- Corta los ajetes y la cebolla en trozos pequeños, rehoga en una sartén con un chorro de aceite hasta que ablanden (10-15 minutos). Añade las cucharaditas de especies y remueve durante un par de minutos, a continuación sube a fuego medio-alto y agrega la carne picada de 2 o 3 veces, cocina hasta que cambie de color. Echa el vaso de vino tinto y deja que evapore el alcohol, después incorpora la harina y remueve constantemente durante dos o tres minutos para que no se pegue. Por último echa el tomate triturado y cocina lentamente durante 15-20 minutos.
- Limpia las berenjenas y córtalas en rodajas de medio centímetro. Extiéndelas en una fuente y espolvorea sal fina de forma generosa, deja que reposen durante 25 minutos. Pasado ese tiempo límpialas debajo del grifo y sécalas bien. Pon una sartén a fuego alto con un chorrito de aceite y dóralas por ambos lados. Reserva.
- Pela las patatas, córtalas en rodajas similares a las de la berenjena (medio centímetro) y cuécelas en agua con un poco de sal durante 8-10 minutos.
- Para la «crema de queso» simplemente mezcla los ingredientes de la segunda parte de la receta con ayuda de unas varillas o de un tenedor. Añade nuez moscada al gusto, también puedes ajustar con sal y pimienta. Integra bien y reserva.
- El montaja es muy sencillo. En el fondo de una fuente pon unas gotas de aceite y extiéndelas bien, así no se pegará al fondo. A continuación coloca una capa de berenjena, otra del relleno de carne y por último la patata «semi-cocida». Repite de nuevo el proceso y cubre con la capa de queso Cottage
- Hornea a 220º hasta que la musaka esté bien dorada, aproximadamente 20 o 25 minutos.
Consejos para la receta
- El relleno de carne es la clave: Vigílalo, debe quedar cremoso. Con la harina, el vino tinto y el tomate obtendrás una especie de «crema con carne», eso dará una gran jugosidad al plato y es la clave del éxito de esta musaka sin bechamel. Si se seca puedes añadir un poco de agua o caldo.
- ¿No encuentras el queso Cottage?: El Cottage aporta un punto increíble tanto en platos dulces como salados, si no lo encuentras en tu supermercado puedes sustituirlo por requesón, el resultado no va a ser el mismo pero seguramente la musaka también te quedará muy rica.
