Mirar la nevera y ver arroz blanco del día anterior. Terror. Pánico.
Comerlo a palo seco no debería ser una opción. ¿Qué hacer con él? ¿Cómo aprovecharlo?
Toma nota de estas cinco ideas. Y la próxima vez, toma nota de esta receta de arroz blanco, con ella podrás aprovecharlo mejor ya que estará cocido al punto.
Un delicioso arroz frito
Una buena forma de utilizar las sobras de arroz blanco es hacer arroz frito.
Este plato es una opción popular porque es rápido, fácil y versátil. Puedes añadir cualquier verdura o proteína que tengas a mano para hacer una comida completa.
¿Cómo hacerlo? Calienta un poco de aceite en una sartén y añade verduras troceadas (en crudo) que tengas por casa: pimiento, cebolla, ajo… Saltea hasta que estén blandas, unos 15 minutos. Después, echa el arroz blanco y cocina 2 o 3 minutos más.
Además, te recomiendo añadir una proteína en los últimos minutos del salteado, puede ser pollo, lomo, gambas, langostinos…
Puedes poner la guinda condimentando todo con salsa de soja o con otras especias.
Una ensalada de arroz con un toque
¿Una ensalada? ¿De arroz?
Sí, es una gran forma de aprovechar el arroz sobrante del día anterior. De hecho, es mi opción favorita junto con el arroz frito.
Con un toque fresco de manzana queda espectacular. Super rica. Y no necesita mucho más que eso, aunque puedes hacerla completita, claro está.
Aquí tienes la receta de ensalada de arroz con manzana.
¿Una tortilla? Una tortilla
Lo sé, suena raro. Pero me estás pidiendo opciones y yo te las doy.
Con ese arroz blanco sobrante también puedes hacer algo muy simple: mezclarlo con huevo y aventurarte a cuajar una tortilla como la de la imagen.
Tardarás unos minutos. ¿Merece la pena? Bueno, es algo diferente que probablemente nunca antes hayas probado.
Todo dependerá de cómo te haya quedado el arroz blanco. Si está sabroso y cocido al punto, atrévete con la tortilla; si ha quedado pasado y/o insípido, sigue leyendo.
El clásico arroz a la cubana (bien hecho)
Te doy tres razones para hacer un arroz a la cubana:
- Es rápido.
- Es fácil.
- Es barato.
Este plato básico cubano suele hacerse con arroz blanco, frijoles, huevos y plátano, pero puedes adaptarlo a tu gusto añadiendo otras verduras o proteínas.
Así lo hago yo:
- Calienta el arroz en una sartén a fuego suave, sin prisa. A continuación, añade las judías y cualquier otro ingrediente que desees incluir.
- Por otro lado, fríe los huevos y reserva.
- Corta por la mitad unos plátanos bien maduros y dóralos en la sartén.
- Mezcla todo junto con un buen tomate frito.
Con su mezcla de sabores dulces y salados, el arroz a la cubana es una excelente opción como plato de aprovechamiento.
Un innovador arancini
Probablemente no te suene este plato, pero es una excelente idea para aprovechar el arroz blanco del día anterior. Sobre todo cuando te ha quedado pasadillo.
Consiste en unas bolitas de arroz similares a las croquetas. Van empanadas y fritas. Se suelen rellenar de queso, generalmente de mozarella.
Por aquí te dejo la receta de los arancini.
¿Y hacer algo dulce? ¿Se puede?
Por poder, puedes hacer arroz con leche, pasteles e historias similares con el arroz blanco del día anterior.
Pero piénsalo, ¿cómo quedará? Si tienes un mínimo de gusto por la buena cocina, no lo hagas. El arroz con leche asturiano se hace al chup chup, con un buen arroz y una buena leche. No hay más.